RESUMEN: Bill se sentía observado, tras aquellos sucesos, dejó de importarle el sentirse así, solo pensaba en que llegue la noche.
TÍTULO: “Cuando caiga el sol”
AUTOR: kasomicu
Banner: Creación de kasomicu
Audiencia: NC-17
Categoría: Slash
Personajes: Bill Kaulitz, Tom Kaulitz
Advertencias: BotTom, Contenido Adulto, Parafilias, Sangriento
Extensión: One-Shot
Género: Criaturas, Lemon, Lime, Paranormal, Twc No Relacionado, Universo Alterno.
Ocasión: No
Pareja Principal: Bill/Tom
Pareja Secundaria: No
Series: No
Estado Actual: Fanfic Terminado
Total Capítulos: 1
Notas: Parafilia: vampirismo, caracterizado por la excitación sexual asociada con una necesidad compulsiva de ver, sentir o ingerir la sangre. En caso de error, por favor, reportar enlace roto en el chat. Gracias.
«Cuando salga el sol»
Bill dormía.
(O por lo menos intentaba hacerlo).
Hacia noches que no podía conciliar el sueño, se sentía vigilado, como si una mirada acechante lo acosase en sus sueños convirtiéndolos en pesadillas. Incluso se atrevía a confesar (con la cara roja de vergüenza) que tenía sueños húmedos con tintes tenebrosos en donde una sombra se posaba sobre él y lo poseía hasta hacerlo gruñir escandalosamente. No es que tuviese problemas con afrontar su sexualidad, él sabía que era gay, así ni pensar que se trataba de su subconsciente, o quizá tantos meses carente de sexo ya hacían mella en él. Se despertó por un sonido sordo, cualquier cosa podría despertarlo ahora.
Se talló los ojos y observó que su ventana se hallaba abierta y filtraba aire que en definitiva no le iría a ayudar mucho en su búsqueda de caer en brazos de Morfeo. Al llegar al borde de la ventana los vellos de la nuca se le erizaron de inmediato y sus dientes tiritaron de frío, lo extraño es que el aire no venía de adentro para afuera sino al revés, Bill giró el rostro y se encontró con unos ojos rojizos y un pálido rostro que estaba enmarcado por unas rastas negras.
—Te he estado observando, noche tras noche, vigilando tus sueños a la espera de poder poseer tu mente pero me es muy difícil. —Bill casi se cae del rebote que dio por la impresión y se sobó la cabeza al golpeársela.
—Yo…
—Tú eres una criatura fascinante al dormir, mi nombre es Tom y sé que el tuyo es Bill —masculló el de rastas arrinconando a Bill.
—¿Cómo lo sabes? ¡¿Cómo llegaste aquí?!
—Lo leí en tu cuaderno, eres desordenado pero eso me gusta, al igual que tú al entreabrir los labios al dormir. Entré por la ventana, eres olvidadizo y siempre se te pasa el hecho de poner el seguro.
No sabían cómo pero estaban ya al borde de la cama. Bill miró los labios rojizos del pálido joven y el piercing que lo adornaba en su comisura y, joder, le entraron unas ganas de comerle la boca.
Tom empujó a Bill contra la cama y fue quitándole sus prendas sin delicadeza, rasgando la ropa y piel a cada paso, dejando marcas rojizas sobre la blanca piel y marcados brazos del joven rubio. Bill se dejaba hacer, estaba como hipnotizado con esa boca, esos ojos, ese cuerpo que podía vislumbrarse bajo las anchas ropas que usaba su acechador.
Siseó por el dolor pero se dejó hacer, permitió que le dejaran marcas al comenzar a besarlo, a morderlo por todo su pecho desnudo, sintió pequeños pinchazos como si en vez de caninos tuviese colmillos. Le quitó los pantalones de franela y sus bóxers y él se fue desnudando de a pocos, demostrando así su cuerpo que parecía pulido en mármol por la perfección con una erección a la vista. Echó a Bill de espaldas y luego comenzó a masturbarle con casi furia, pero consiguiendo su objetivo, el que se excitase a sobremanera, escupió sobre su mano y siguió haciéndolo hasta ver el líquido preseminal. Después lo observó fijamente y se empaló a sí mismo, comenzando a mecerse mientras soltaba alaridos bestiales, Bill gruñía y gemía de dolor, aún confundido por todo pero no pensando claramente en ese instante.
Tom bajaba la cabeza para ahora acercarse a su cuello e ir lamiéndolo, mordiéndolo y después lamiéndolo.
—Con esto no te convertirás en un monstruo como yo —dijo Tom luego de lamerle la sangre que salía de su cuello.
—¿Ah?
—Sello las heridas que te hago —soltó acezado y siguió meciéndose sobre Bill. Ahora Bill tomándolo por la cintura y ayudándolo a que subiese y bajase para que se penetrase a sí mismo—. Esto es mejor de lo que me imaginé.
—¿Te imaginaste esto? —soltó entre resuellos Bill. Tom asintió.
—Cada vez que te miraba dormir.
Ambos se corrieron y el semen de Tom se entremezclo con la sangre de Bill sobre el vientre de este. Tom se encargo de lamerlo todo con una expresión de lascivia que hacía estremecer a Bill.
—¿Volveré a verte? —preguntó después de que el moreno se vistiera.
—Cada vez que caiga el sol.
F I N
Gracias por leer.
DISCLAIMER: Los nombres/imágenes de las celebridades son sólo prestados, no representan a las celebridades en la vida real. No se intenta ofenderlos, ni a sus familias, ni a sus amigos. Los personajes originales y las tramas son propiedades del autor. Es un trabajo de ficción. No se infringe copyright. No se acepta el plagio.